Dos estudios de diseño, uno de moda y otro industrial, se juntaron para darle una segunda vida útil al nylon ultrafino de estos objetos voladores en desuso.
¿Y si transformamos el excedente de la fabricación de los paracaídas en sillas y mecedoras?: Layer, la firma de diseño industrial, liderada por el británico Benjamin Hubert y apasionada por el diseño responsable y sostenible, se asoció a Raeburn (especialistas en moda) para crear una original colección de edición limitada llamada Canopy.
Canopy explora procesos creativos inesperados en la manera de materializar muebles. La colección está integrada por cuatro sillas mecedoras hechas de marcos de acero y tapicería de paracaídas reciclados de paracaídas para militares y frenos de aeronaves. El nylon ultrafino trabajado por las costureras de Raeburn dan lugar a estas piezas únicas.
Las estructuras de acero simples y modernistas proporcionan un lienzo en blanco para que cada textil sea el elemento más expresivo de la pieza. Los textiles se tensan sobre las estructuras metálicas, de modo de modo de que cada una mantenga su particularidad.
“Se trata de un lenguaje sintonizado con la semántica de un paracaídas en vuelo: el sillón se balancea suavemente hacia adelante y hacia atrás mientras la pantalla reconfigurable se inspira en la sección y la construcción de un ala”.
Así, la colección utiliza la estricta geometría de las estructuras de acero como base para experimentar con tapicería de paracaídas reciclada innovadora y con visión de futuro.
