El diseño toma como inspiración la vida en comunidad de las abejas. Será un espacio sustentable e inclusivo.
Un espacio de vida compartido e inspirada en la estructura y organización de los panales es la propuesta del estudio de diseño ucraniano Gianluca Santosuosso para el 2030. Se llama Hive y es también una nueva manera de vivir colectivamente.
El proyecto busca crear un espacio muy eficiente y en comunión con la naturaleza. Los hexágonos regulares son la mejor manera de aprovechar el espacio, se describe en el informe del proyecto.
Hive será muy versátil: combina las propiedades del panal con la forma de la casa arquetípica y crea un nuevo tipo de espacio de vida híbrido capaz de fusionar la eficiencia de la naturaleza con el ingenio de los humanos y lo natural.
“Nuestra ambición es introducir una nueva ecología de lugar donde nuestra presencia no dañe el ecosistema sino que enriquezca, apoye y se beneficie enormemente de su regeneración”, dicen desde el estudio.
La diversidad y la inclusión son dos valores que el proyecto Hive pretende promover.
Es fundamental permitir que los habitantes de todas las edades se sientan cómodos, seguros y verdaderamente útiles para la comunidad a través de su papel individual, contribución y propósito en ella.
El diseño crea un hogar biofílico con lugar y significado para todos. La flexibilidad del sistema modular de colmena permite una gran personalización para que las personas adapten sus hogares a las necesidades específicas de circulación, accesibilidad y estilo de vida, explican desde el estudio.
El mismo módulo está diseñado para poner una escalera, un ascensor o una rampa.
En los pisos superiores, los módulos hexagonales abiertos permiten a los vecinos compartir jardines, parques o plazas. Las terrazas también serán lugares de encuentro entre vecinos.
Siguiendo a las abejas, que son insectos sociales y que viven juntas en comunidades bien organizadas.
Otro de los principios fundamentales que guían el proyecto es el de la eficiencia. Se espera reducir el consumo de agua, recolectar y reutilizar el agua de lluvia, instalando redes para el agua potable.
Los sistemas de calefacción, refrigeración y agua caliente se basan en pilas geotérmicas de circuito cerrado y bombas de calor para el control de la temperatura y el confort interior. La idea es minimizar el sobrecalentamiento durante el verano y el ahorro de energía durante el invierno. Los sensores de calidad del aire, los sistemas de ventilación mecánica y la ventilación natural garantizan la seguridad y los más altos estándares de calidad del aire.
La tecnología así está al servicio de lo que la naturaleza inspira y transmite como sabiduría.