Kunga Positiva Mente! formó parte de Nación Emprende y participó en la última edición de PuroDiseño. Los hermanos Carrieri llevan adelante este proyecto que busca transformar el día de quien los lee.
“Las mejores cosas de la vida no son cosas”. “Tomate tu tiempo y disfrutá de la vida”. Llevar un mensaje positivo a todo aquel que se lleve un anotador, un cuaderno o agenda de Kunga a casa, es el objetivo más importante de esta marca que nació hace cinco años, después de algunas charlas productivas entre dos hermanos: Natalia Carrieri, diseñadora gráfica y Cristian, publicista.
Cada una de sus agendas, el producto estrella, lleva una frase plasmada para cada día, de modo que quien las lea se sienta un poco más acompañada y con un actitud más optimista al empezar el día.
Por estos días, el desafío de la marca, comparte Cristian, es posicionarse con ese producto y empezar a potenciar, cada vez más lo sustentable. “La idea es probar con el papel ecológico e incorporar todo lo nuevo que hay en relación al papel plantable”.
Para esta dupla el proceso siempre es intenso. “Aunque Natalia, se ocupa más de materializar las ideas que tenemos, como somos sólo dos, nos encargamos un poco de todo. Craneamos nuestro producto, lo diseñamos, lo materializamos y después lo amamos”. No es para menos.
“Es el diseño el que nos permite lograr un producto único que nos permita reinventarnos y poder competir”, comparte. A lo largo de estos años, por supuesto, hubo altibajos.
“La venimos peleando mucho. Nos replanteamos todo muchas veces, pero nunca pensamos en la posibilidad de bajar los brazos y abandonar el proyecto”. En alguno de esos momentos difíciles por los que pasó la marca, pidieron un préstamo a Banco Nación, que fue el que ahora, de algún modo, les permitió acceder al programa Nación Emprende y a la feria.
“Nos sentimos muy mimados y cada una de las personas que participaron, nos ayudaron a que la marca crezca y se consolide un poco más”, cuenta y recuerda la experiencia de haber formado parte de PuroDiseño. “Nos encantó porque pudimos conocer a otros diseñadores, quizás con otro desarrollo o más evolucionados que nosotros. Fue como vernos a nosotros mismos dentro de algunos años. Además nos sirvió para ver nuevas tendencias y nos abrió las puertas a montón de contenidos nuevos”.
Y a escuchar la devolucion de la gente, que siempre es alentadora. “Cuando alguien te dice ‘me cambiaste el día’ uno sabe que no se equivocó en creer en el proyecto”. Más ganas de seguir apostando.